Narra Eric Hobsbawm en su apasionante obra La era de la revolución los avatares de nuestro mundo tras el telúrico suceso de 1789: todo iba a ser transformado en una vorágine alimentada por múltiples cambios paralelos en lo económico, lo político… Una brillante reconsideración histórica que ha de servirnos para, también, alumbrar nuestra visión de un mundo, el actual, cuya historia social se acelera vertiginosamente. La crisis del régimen español del 78, retroalimentada por la crisis general del modo específicamente neoliberal de gestión del capitalismo, así como de las supervivencias keynesianas, inaugura dinámicas inéditas. Es en este marco que el régimen en el que vivimos trata de recomponerse en base a la repetición de lo semejante --“necesitamos un PSOE fuerte, capaz de cumplir su papel consensual”, nos ha dicho Luis María Anson--, sobre la emergencia de novedosas formas de gestión científica de la acción penal, liberada de sus tradicionales ataduras liberale...